Manos Esforzadas: «El fruto de su trabajo en tus manos»

Iniciamos con el sueño de ver a las comunidades donde servimos salir adelante, desarrollarse, empoderarse, ser agentes de su propio cambio. Nos dimos cuenta de que son tantas las mujeres que día a día luchan por sacar adelante a sus familias, por encontrar una forma de empleo exitosa. Muchas de las mujeres de Manos Esforzadas vendían empanadas en su comunidad, ofrecían servicios de tapizado o decoraciones navideñas a sus vecinos, pero muchas veces las empanadas no se vendieron, sus vecinos no se interesaban en el tapizado o pagaban muy poco por las decoraciones navideñas que había tomado tanto tiempo elaborar.

Cuando empezamos el programa Manos Esforzadas solo teníamos una mujer, con ella empezó todo. Fuimos enseñándole las técnicas y la manera correcta de diseñar un producto de calidad, desde entonces ha sido un proceso largo, de aprendizaje para todos. Hoy tenemos 5 mujeres como parte del proyecto y nuestro sueño es ver cada día más y más mujeres involucradas.

Dios nos ha bendecido permitiendo que empresas como Supermercados Bravo y Farmacias Carol nos abran la puerta para colocar estos productos. Mientras más productos Manos Esforzadas se venden, más mujeres pueden seguir uniéndose al programa. La razón de esto es porque creemos que el obrero es digno de su salario, por eso el precio que se paga a las productoras permite condiciones de vida dignas y así queremos seguir creciendo. Seguimos renovándonos cada día, pensando en nuevos productos y nuevos mercados que apoyen a estas hermosas mujeres.